Aquí se reunió por vez primera, en 1774, el Congreso formado por representantes de las colonias rebeldes a Gran Bretaña en la Revolución Americana. En 1775, fue sede del Segundo Congreso, que nombró a George Washington como jefe del Continental Army. En su Independence Hall, se firmó la declaración de Independencia, el 4 de julio de 1776. Fue brevemente ocupada por las tropas británicas entre diciembre de 1776 y febrero de 1777, fechas entre las cuales los congresistas tuvieron que trasladarse a Baltimore. En 1783, el Tercer Congreso Continental aprobó allí la propuesta de Oliver Pollock de colocar un retrato de Bernardo de Gálvez en su sala de reuniones. Era el reconocimiento de la ayuda prestada por el que fuera gobernador de La Luisiana española.
Esta ciudad ha sido la estrella de varias películas, como la famosa comedia que, en 1940, protagonizaron Katharine Hepburn y Cary Grant (Historias de Filadelfia), o la muy emotiva que, en 1993, tuvo a Tom Hanks y Antonio Banderas en los papeles principales (Filadelfia).
El protagonista histórico español sería Diego de Gardoqui, el encargado por el rey Carlos III para gestionar suministros y dinero a los norteamericanos. Su estatua se encuentra en Sister Cities Park. Es obra del escultor Luis Antonio Sanguino y fue entregada a la ciudad por el rey Juan Carlos I en 1976.
La Old City de Filadelfia conserva un agradable aire colonial, con árboles, farolas clásicas y jardines y donde destacan bonitos edificios de ladrillo. Hay un importante conjunto histórico relacionado con la Revolución, gestionado por el National Park Service, y se encuentra allí el recientemente inaugurado Museum of The American Revolution. También puede visitarse la tumba de Benjamín Franklin, la Liberty Bell o la casa donde vivió Betsy Ross, de quien se dice que cosió con sus propias manos la primera bandera norteamericana.
En la casa donde residió Juan de Miralles, el primer representante español ante el Congreso (3rd South Street, junto a Powel House), existe una placa colocada por iniciativa del gobierno español en 1967. En esa misma casa vivió su sucesor, Francisco Rendón, quien, por cierto, la alquiló a George y Martha Washington en el invierno de 1781-82.